En la exposición los espectadores experimentan el espacio y el arte, por así decirlo, en dos líneas paralelas que conducen al infinito. En su respectiva perspectiva específica del cosmos, buscan acceso a los misterios de la vida.
Esto es lo que dice Aurora Valero sobre la proximidad de la ciencia y el arte: «La ciencia y el arte intentan acercarse a la verdad. La ciencia hace esto de una manera lógica y concreta. El arte sigue el camino de la intuición para ver lo que de otro modo permanecería oculto: los sentimientos pero también los hallazgos. Cuando vi el universo con todas las tensiones, velocidades, constricciones y regeneraciones, experimenté lo que lo mueve todo, no solo en nuestro planeta sino en el universo: la increíble sensación de belleza que, casualmente, aparece está perfectamente estructurada.»
Aurora Valero (1940, Alboraya, Valencia) El descubrimiento de las grandes obras de la Historia del Arte a los trece años, la impulsó a dedicarse a la creación artística para transcribir y dar forma de una manera especial y consecuente a la vida misma.
La transformación que ello implica y el deseo de compartir ampliamente la experiencia, hizo que desde los veinte años, se dedicara también a la educación artística, es decir, a transmitir a las generaciones jóvenes, el conocimiento y las vivencias que desarrollan la sensibilidad y aumentan la capacidad de sentir, de construir y de pensar.
Estas dos actividades entrelazadas, han ocupado su tiempo y su vida. No obstante, para encauzarlas debidamente, también ha tenido que profundizar en la investigación, a fin de que sus objetivos tuvieran una justificación teórica. Por tanto, la creación artística, la formación de generaciones jóvenes, la investigación y su divulgación, han sido la aspiración más importante de su quehacer humano.
Universität Stuttgart, Institut für Raumfahrtsysteme, IRS. Öffentlichkeitsarbeit. STUTTGART
Imagen: Aurora Valero. Sueños del Alba III. 2017. 200X130cm