La artista ofrece un escenario cómplice, un testigo de una fuga, un conocimiento en movimiento, cuidado y resistencia, un espacio compartido que busca dar testimonio de una sociabilidad radical. Ponernos en riesgo, permitir el acceso, ser poseídos por un despojo. Un espacio de escape, a plena vista, sin dirección ni trama.

Entre colchones vacíos nos encontramos con restos de cuerpos moldeados que ya no están presentes, formando una oscura narrativa a través de su trayectoria de afectos.

La artista nos guía a través de presencias latentes de brujas y magos, la figura fronteriza, cuyo cuerpo no es ni masculino ni femenino, ni animal ni humano, ni joven ni viejo, ni vivo ni muerto. Ofreciendo el escenario de un rito, un detonador, un espacio navegable para un encuentro.

Los formularios están contenidos y se disipan. Las tintas, formas y trazas están hechas para relacionar su condición; son anfitriones de una historia accesible en sus partes internas: lisa, suave, permeable, afilada, a punto de desbordarse, escapando de las estructuras de hierro, entrando en una tensa dicotomía entre soporte y limitación. Cadenas podridas en la pared. Fuerzas condensadas, de líquido a sólido, de gas a líquido, heredadas y pervertidas, palpables en esas velas no encendidas que anticipan la reanudación del ceremonial.

Aurrekoetxea invoca una multiplicidad dentro de nosotros, nos invita a hacer una pausa, a elegir un espacio, a deshacernos del miedo a ponernos en peligro en esta conspiración colectiva. Escucha lo inaudible, siente lo que no se ha sentido, nunca consientas en ser un solo ser.

Nora Aurrekoetxea (n. 1989, Bilbao) recibió su BFA de la Universidad del País Vasco (Bilbao, España) en 2003 y completó su MFA en el Royal College (Londres, Reino Unido) en 2017. Recibió la Beca de la Fundación Botín (2017 ) y ha sido artista en residencia en la Cité Internationale des Arts de París (2018) y el Solomon R. Guggenheim de Nueva York (2018). Ha sido galardonada con el premio ARCO de la ciudad de Madrid (2020) y ERTIBIL (2020), y su obra forma parte de la colección permanente del museo Ca2m (Madrid, España). Inaugurará su primera exposición individual en Madrid en septiembre de 2020 en la galería Juan Silio.