Exposición en el marco de la celebración del festival de la luz LUMINALE en la ciudad de Frankfurt.
La luz viaja infinitamente por un círculo infinito. Como los sueños de infinito que circunvalaron el globo cuando España acomete la primera aventura global de la historia, hace 500 años. De la luz de España hasta la cuna del Sol Naciente, y vuelta: de sol a sol, abriendo vías a la luz siempre encendida del saber. El llamado “Viaje más largo” abrió brecha en los límites de la ciencia, por la que entró la luz de un mundo nuevo. Europa se abrió a Asia y la sabiduría del Oriente se habló con la razón de Occidente.
Borges escribió que “El futuro no es lo que va a pasar sino lo que vamos a hacer”. Con ése propósito partió un barco hacia lo desconocido que habita entre el cielo y el mar. Entre estos dos espejos, Garaizabal revive el contacto entre Europa y Asia, entre un pasado y un futuro en el que siempre estamos perdidos, hasta que descubrimos que el futuro no es un lugar sino una casa a construir.
En el aniversario de la primera noticia llegada sobre Corea, enviada por el jesuita español Gregorio Céspedes, la escultura pública de Juan Garaizbal “Lost Infinite” recrea, mediante acero, metracrilato y led, una pagoda Baekje coreana, desaparecida, vinculando su ausencia con un presente interactivo de sensaciones replicadas, entre los espejos de la realidad y el deseo, en las que perderse infinitamente.

Nacido en 1971 en Madrid, Juan Garaizabal obtuvo su licenciatura en 1993 en la Universidad Pontificia Comillas de Madrid y Reims. Sus grandes instalaciones públicas se pueden ver en muchas ciudades, incluyendo Miami, La Habana, Berlín y Valencia. Actualmente vive y trabaja entre Madrid, Berlín y Miami.  (I. Cervantes press-release)