La exposición, que incluye alrededor de un centenar de obras creadas en Antibes Juan-les-Pins, coloca una nueva perspectiva de lo que fueron vacaciones eminentemente de estudio. Es en 1920 que Pablo Picasso comienza a pasar sus vacaciones en Antibes Juan-les-Pins, un lugar donde regresará casi todos los años hasta la Segunda Guerra Mundial.
Todas estas obras inmersas de la luz del Mediterráneo dan testimonio del placer con el que el artista encuentra las orillas del mar que le han visto nacer. Es solo la familiaridad y el gusto por el paisaje tan típico de la Riviera francesa lo que motivará al genial artista a regresar también en el período de posguerra y, en particular, en 1946, el año en que la colección del museo de Antibes vió la luz, una Colección en la que el artista mostrará su afinidad con la ciudad, a través de composiciones que reflejan el pasado clásico y el mitológico.
Musée Picasso. Château Grimaldi . Place Mariejol. ANTIBES. FRANCE
http://www.antibes-juanlespins.com
Imagen: Mujeres corriendo por la Paya. Picasso 1922. Musée Picasso