«Un hermoso día con una pequeña tormenta» ha sido creada en Toronto. Se compone de varias pinturas de formato grande y medio. Las obras están llenas de la explosiva energía creativa de Ciria. Es un hombre grande, no solo en estatura, sino también en carácter y personalidad.

Su pintura está generada entre la imaginación y la razón con un color plasmado desde su libre albedrío en consonancia con el rigor constructivo, y la geometría, que nace del sentido de la medida, para llevar a término una estética abstracta con sentido metamórfico.

José Manuel Ciria nació en Manchester en 1960 de padres españoles, y creció en Madrid donde desde muy joven se inició en el dibujo y la pintura, vocación que le lleva a los talleres del Círculo de Bellas Artes y a la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Complutense, Madrid, donde no llegó a terminar, pero continuó de manera autodidacta trazando un discurso que desde el primer momento trasciende, mostrando su primera exposición individual en una galería de París el año 1984. Y desde entonces su obra, que se inicia en la figuración, busca vocabulario de la abstracción con una obra de expresión universal. En 1994 obtiene la Beca del Ministerio de Cultura para la Escuela de España en la Ciudad Universitaria de París y al año siguiente la del Ministerio de Asuntos Exteriores para la Academia de España en Roma.

Ciria es, sin duda, uno de los creadores más cualificados de su generación, un pintor internacional que ha residido en las últimas décadas en Madrid, Nueva York y Londres; con una obra presentada en museos de Moscú, Tel Aviv, Varsovia, Berna, Mérida (México), Buenos Aires, Santiago de Chile e IVAM de Valencia, entre otros muchos espacios… y ha sido galardonada una veintena de concursos y bienales, entre éstas el Primer Premio-Medalla de Oro Jurado Internacional de la V Bienal de El Cairo, y el Primer Premio del Jurado Internacional de la Trienal de Arte Gráfico de El Cairo. Y su obra forma parte de importantes colecciones públicas y privadas españolas y extranjeras.