Andrea Lería nacida en Barcelona en 1980, ha residido durante años en Chile. Actualmente vive y trabaja en Barcelona. Precisamente el retorno a Barcelona, su ciudad de origen, la motiva a profundizar sobre el sentido de pertenencia y trama familiar. Regresa a sus recuerdos de infancia para recuperar fotografías, documentos, objetos y testimonios que traduce en una serie de pinturas y dispositivos plásticos.

En palabras de la teórica y artista Alejandra Wolff sobre el trabajo de Lería: “Los recuerdos son suturas entre ese pasado y nuestro presente.  El olvido y la desmemoria se dibujan como el silencio tenue de las superficies que aprisionan las figuras de estas pinturas, cuyos rostros representados, se han archivado bajo la levedad cristalina de los polímeros transparentes.”

La artista transita entre ciudades, entre memoria y olvido, entre archivos e imaginación, para componer un relato personal de frágiles retratos que dan cuenta tanto del gesto pictórico como de sus propios recuerdos.

La figura humana se articula como eje central de su propuesta, fragmentando lo representado y desplazando la imagen fotográfica hacia la obra plástica, para más adelante desprenderse de la relación mimética de su referente.

 “(…) Pintar es poner un rostro a las superficies sin nombre. Capa tras capa, como un palimsesto, las tramas de Lería firman esas imágenes como propias, modeladas por el patrón de su impronta. La marca de su letra, el trazo de su mano, la densidad de su peso, la caída de su brazo, la fuerza de su impulso. Esa es su autoría.” apunta Wolff.

El resultado de la investigación de Lería toma forma en instalaciones que presenta al público como un laboratorio de experimentación, re-significando los medios y los materiales. Combina pinturas, dibujos, textos, objetos, videos y sonido, revelando el proceso de producción y transformando el espacio expositivo en un lugar para la reflexión.